Para la mayoría de las empresas, el Alcance 3 representa la mayor parte de sus emisiones, por lo que es esencial establecer objetivos a largo plazo para reducir estas emisiones en toda la cadena de valor. Como parte de nuestra serie sobre los cambios propuestos por la iniciativa Science Based Targets (SBTi) a su Estándar Corporativo de Net Zero, analizamos cómo los cambios en los objetivos obligatorios de Alcance 3 a largo plazo podrían obstaculizar los procesos de descarbonización de las empresas.
Contexto
La SBTi ha publicado recientemente un borrador de revisión de su Estándar Corporativo de Net Zero. Con el objetivo de acelerar la descarbonización corporativa, el borrador propone modificar el proceso de establecimiento de objetivos para las emisiones de Alcance 1, 2 y 3. En esta serie, exploramos temas clave, entre ellos:
- Objetivos de Alcance 3 a largo plazo: las empresas podrían dejar de estar obligadas a establecer objetivos de Alcance 3 a largo plazo, lo que podría debilitar la ambición climática y las trayectorias de descarbonización.
- Requisitos de Alcance 3 para empresas de Categoría A y B: se proponen criterios diferenciados de Alcance 3 para las empresas, según su tamaño y ubicación. Las empresas de “Categoría A” comprenden grandes compañías o medianas empresas ubicadas en países de ingresos altos o medianamente altos. Las demás empresas medianas, pequeñas y microempresas se consideran “Categoría B”.
- Mitigación indirecta en la cadena de valor: la SBTi ha propuesto una guía sobre el uso de mecanismos de mitigación indirecta de emisiones para apoyar las trayectorias de descarbonización corporativa, como el enfoque book-and-claim para el uso de combustible de aviación sostenible.
El borrador de revisión busca apoyar la descarbonización corporativa manteniendo un enfoque pragmático en cuanto a los datos disponibles y el nivel de ambición esperado. Algunos de los cambios facilitarán el establecimiento de objetivos y fomentarán una mayor adopción. Sin embargo, también conllevan el riesgo de generar ambigüedad. En esta serie sobre los cambios propuestos por la SBTi, nuestros expertos analizan sus implicaciones y la delgada línea entre adoptar un enfoque pragmático en la descarbonización corporativa y proteger las reducciones de emisiones a largo plazo.
Las emisiones de Alcance 3 suelen ser la mayor fuente de emisiones corporativas y el obstáculo más difícil en el camino hacia el Net Zero, como se señala en nuestro informe.‘Derribando las barreras empresariales para alcanzar el Net Zero'. Si bien la mayoría de las empresas encuestadas había establecido objetivos de reducción a corto plazo para las emisiones de Alcance 1 y 2, solo una de cada cinco había fijado un objetivo para el Alcance 3. Esto convierte al Alcance 3, sin duda, en un tema espinoso para los equipos de sostenibilidad, uno que no puede ser ignorado.
Falta de visión a largo plazo
El Estándar Corporativo de Net Zero actual de la SBTi exige que las empresas establezcan objetivos a largo plazo para las emisiones de Alcance 1, 2 y 3 como parte de su meta de Net Zero. Esto garantiza que las compañías desarrollen una estrategia a largo plazo para reducir las emisiones a lo largo de su cadena de valor. Sin embargo, bajo el estándar revisado, solo se requerirían objetivos a largo plazo para Alcance 1 y 2 en las empresas de Categoría A; la inclusión de objetivos obligatorios de Alcance 3 a largo plazo aún está en proceso de consulta.
Con este cambio propuesto, la SBTi reconoce los retos y la complejidad que implica la reducción de emisiones de Alcance 3, permitiendo una mayor flexibilidad. No obstante, si los objetivos de Alcance 3 a largo plazo se vuelven voluntarios, existe un riesgo real de que las empresas pierdan el enfoque a largo plazo en la descarbonización de sus cadenas de valor. Esto no solo elimina la planificación a largo plazo para la mayor parte de las emisiones corporativas (que a menudo superan el 80 % de la huella de carbono total de una organización), sino que también minimiza la responsabilidad que las empresas tienen sobre sus cadenas de valor.
Según la guía revisada de la SBTi, los objetivos de Alcance 3 a corto plazo se volverían obligatorios para las empresas de Categoría A, independientemente del porcentaje que represente el Alcance 3 dentro de sus emisiones totales. Combinado con marcos de seguimiento más estrictos, esto reforzaría la importancia de lograr reducciones inmediatas en las emisiones de la cadena de valor. Sin embargo, avanzar en incrementos de cinco años puede no ser suficiente para impulsar el cambio transformador que la cadena de valor requiere.
Sin una perspectiva a largo plazo, las empresas corren el riesgo de establecer objetivos inadecuados y de no priorizar las acciones correctas en los momentos clave. Además, podrían comprometer el respaldo de la alta dirección y debilitar el argumento empresarial para la innovación, dos de las principales barreras internas a las que ya se enfrentan los equipos de sostenibilidad.
En Carbon Trust, recomendamos firmemente que, como mínimo, las grandes empresas establezcan objetivos a largo plazo junto con sus metas a corto plazo, y que las empresas más pequeñas lo hagan en la medida de lo posible. Esto garantiza que las acciones a corto plazo estén alineadas con los objetivos a largo plazo y que se mantenga el enfoque en las principales fuentes de emisiones.
La importancia de la planificación
A pesar de la propuesta de eliminar los objetivos explícitos de Alcance 3 a largo plazo, la SBTi ha sugerido algunas medidas compensatorias. Una de ellas es que todas las empresas deben desarrollar y publicar un plan de transición climática en el plazo de un año tras la validación de sus objetivos. En este plan, las compañías deben presentar “una hoja de ruta con las acciones que se llevarán a cabo para alcanzar el Net Zero a más tardar en 2050”, lo que implica, en la práctica, que las empresas deberán planificar reducciones a largo plazo en su cadena de valor, incluso si estas no se establecen como objetivos separados de Alcance 3.
Sin embargo, para crear un plan de transición significativo, las empresas necesitarán tener una visión clara de cómo sería una descarbonización exitosa para 2050. Si no existen objetivos internos, definir los pasos a largo plazo será difícil. Por el contrario, contar con un objetivo a largo plazo facilitará el análisis de descarbonización, brindando la claridad y confianza necesarias para tomar decisiones informadas.
Al examinar toda la cadena de valor con una mirada de largo plazo, las empresas pueden identificar dónde se necesita innovación y desarrollar de forma proactiva nuevos modelos, productos o procesos. Este enfoque con visión de futuro permite a los líderes empresariales contar con el tiempo necesario para probar, escalar e implementar nuevas formas de trabajo, evitando decisiones reactivas bajo presión más adelante, que pueden resultar más costosas y disruptivas. Por esta razón, creemos que un plan de transición será mucho más eficaz si las empresas cuentan con un objetivo establecido, incluso si este solo se comunica de forma interna.
Mayor enfoque en las emisiones de los proveedores
Para seguir fomentando la descarbonización de Alcance 3 a largo plazo, la SBTi está considerando introducir nuevos tipos de objetivos centrados en las compras sostenibles. Una de las propuestas es que las empresas garanticen que sus proveedores de primer nivel (Tier 1) hagan la transición hacia el Net Zero y cuenten con objetivos alineados con el límite de 1.5 °C de calentamiento global. Esta medida busca aprovechar la capacidad de influencia de las empresas sobre sus principales socios de suministro y así impulsar la descarbonización a lo largo de la cadena de valor. Los cambios propuestos también darían mayor relevancia a los objetivos a corto plazo y crearían un entorno donde la colaboración estrecha con los proveedores se vuelve una actividad crítica para el negocio.
No obstante, desde Carbon Trust desafiamos a las empresas de Categoría A —que cuentan con mayor poder de compra— a mantener un alto nivel de ambición y superar los criterios obligatorios, ya que influir únicamente sobre los proveedores Tier 1 no permitirá alcanzar la escala de cambio necesaria. En el sector de la moda, por ejemplo, la producción de Tier 2 —que incluye la fabricación y el tratamiento de telas— representa entre el 45 % y el 65 % de las emisiones de Alcance 3, según el informe The State of Fashion de McKinsey. Por lo tanto, centrarse solo en los proveedores de primer nivel no es suficiente.
En su lugar, los recortes significativos de emisiones dependen de que la acción climática se propague a lo largo de todos los niveles de la cadena de suministro. Con los avances en descarbonización ya fuera de ruta, las grandes empresas pueden —y deben— hacer mucho más a lo largo de toda su cadena de valor. Recomendamos que los equipos internos identifiquen los focos de emisiones en los distintos niveles de proveedores y, a partir de ahí, construyan un plan de involucramiento que impulse el cambio en toda la base de suministro, no solo en quienes tienen un vínculo directo con el negocio.
Ir más allá de lo requerido
En términos generales, el panorama para el Alcance 3 en el estándar revisado de la SBTi es mixto. Si la SBTi no hace obligatorios los objetivos de Alcance 3 a largo plazo, existe un riesgo real de que los avances en la reducción de emisiones no sean suficientes. Las empresas más ambiciosas probablemente mantendrán su rumbo y establecerán estos objetivos de todos modos, pero otras podrían reducir su nivel de ambición y enfocarse únicamente en reducciones a corto plazo.
Los objetivos a largo plazo son fundamentales para mantener una dirección estratégica y lograr recortes de emisiones significativos. Ya se observa un buen progreso en los Alcances 1 y 2, pero es necesario aumentar la acción y la ambición en torno al Alcance 3. Animamos a las empresas a exigirse lo máximo posible en este aspecto, utilizando los requisitos propuestos por la SBTi como una plataforma de impulso para ir más allá.
Solo mediante una combinación de planificación estratégica, análisis detallado de reducción y una implementación sólida se logrará el nivel de reducción de emisiones de Alcance 3 necesario para alcanzar el Net Zero.
No arriesgues actuar sin una visión a futuro. Habla con nosotros sobre cómo reducir las emisiones en su cadena de valor de forma estratégica, eficaz y con ambición.
1Cabe señalar que el borrador de revisión se encuentra actualmente en proceso de consulta. Ninguno de los cambios propuestos ha sido finalizado.
Navegando el cambio: Guía del Estándar Corporativo Net Zero V2.0
Regístrate de forma gratuita a nuestro webinar online y descubre los cambios del Estándar Net Zero v2.0 y su impacto en las metas climáticas de las organizaciones en Latinoamérica.
¡No te lo pierdas!
REGÍSTRATE AQUÍ